Muchos ya se hicieron el propósito de comenzar la dieta para no pasar vergüenzas en la playa este verano, otros tienen ya pusieron las metas de crecimiento que su negocio deben alcanzar este 2011, algunos comenzarán por fin a hacer ejercicio, y otros, por primera vez en sus vidas, van a empezar a ahorrar...
El problema con estos propósitos es que la mayoría necesitamos ayuda para cumplirlos. Los que quieren hacer ejercicio, por ejemplo, se meten al gimnasio porque necesitan al entrenador que esté detrás de ellos y el "dolor" de pagar una cuota para animarse a ir. Bueno, algo así las compañías de seguros han creado para aquellos que tienen como propósito de año nuevo ahorrar. Ellas te ayudan de esta forma:
- 1ero. Te cobran tu ahorro:
Al meter el ahorro en tu lista de recibos y cuentas por pagar, la compañía de seguros te ayuda a concebirlo como una obligación que tienes que contemplarla en tu presupuesto. - 2do. Te "candadean" el ahorro:
El dinero a la vista es una tentación que lleva a muchos a claudicar su proyecto de ahorro. Para evitar esto, las compañías de seguros le ponen "candado" a tu ahorro para que no lo saques antes del plazo contratado, y si lo sacas será con una penalización que te hará reconsiderarlo seriamente y dejarlo para casos extremos. - 3ero. Protegen tu ahorro:
Si acaso te invalidas la compañía te paga una indemnización y además te "picha" el ahorro -el cual recibirás al final de plazo contratado. Si falleces, también hay una indemnización para tus beneficiarios. - 4to. Te genera rendimientos:
Además de todo esto las compañías de seguros te generan rendimientos por encima de lo que ofrecen los bancos, y puedes escoger entre rendimientos flexibles o garantizados. - 5to. A tu medida:
Aquí no hay con que "no me alcanza" o "no completo", porque tú decides cuánto ahorrar, en qué forma, y en que plazo.
En conclusión: si tu propósito este año es ejercitarte en eso del ahorro, las compañías de seguros te ofrecen el mejor gimnasio para que lo hagas, y lo hagas bien.
